DÍA 17 – INTUYE

Ajna. El centro energético del tercer ojo, ubicado en nuestra frente, en el entrecejo, es un puente de conexión entre el mundo energético y el físico. Este chakra nos trae la conciencia de la intuición.

Está simbolizado por dos pétalos: Los dos mundos de la realidad, lo inmanifiesto y lo manifiesto, los dos ojos físicos, las dos energías entrelazadas. Los pétalos son como nuestros dos ojos físicos, a cada lado del tercer ojo; como los dos lados del cerebro trabajando en armonía; o como las alas trascendiendo las limitaciones físicas que simbolizan la capacidad de trascender  el tiempo y el espacio. Dentro de él hay un triangulo con la punta hacia abajo que simboliza la energía divina entrando en conexión con el ser humano y el símbolo om, el sonido primordial divino.

Hoy te invito a entrar en contacto con este centro de energía y con la conciencia que nos aporta. La intución, una herramienta innata en cada ser humano, pero que no siempre utilizamos por lo acostumbrados que estamos a ver la vida desde la mente lineal y estructurada.

Necesitamos entrar en quietud, en ser, estar y soltar la necesidad de la mente por saberlo y comprenderlo todo, para entrar en conexión con el chakra del tercer ojo y poder vibrar en su energía.

Este centro de energía está relacionado con la glándula pineal y a través de él conectamos con la percepción, la imaginación y la creación de realidades mediante la proyección de nuestras visualizaciones.

Así como nuestros ojos físicos permiten la percepción de la realidad al cerebro, el tercer ojo es el que permite la percepción de la energía intangible.

Cuando trabajamos en la conciencia de este centro de energía abrimos la puerta a nuestra intución y sabiduría, para poder discernir y tomar decisiones desde nuestra esencia y teniendo en cuenta el campo de energía que contiene a todo lo que es.

A través de este centro energético podemos percibir la vibración la luz y del color más allá de lo que el espectro de lo que alcanzamos a ver con los ojos físicos, también podemos expandir nuestra visión y ver más allá de lo tangible, percibiendo la energía y la vibración de los elementos con los que entramos en contacto y también podemos trascender las barreras del tiempo.

Por eso cuando meditamos o entramos en estados de conciencia expandida, pueden aparecer colores, formas y sensaciones variadas así como puede pasar el tiempo muy rápido o muy lento.

Te recomiendo el siguiente ejercicio:

¿Te acuerdas de la música 8D?

El siguiente video tiene música 8D para activar la energía de tu tercer ojo.

Así que ponte tus audífonos, ponle play al video, lleva tu conciencia a tu entrecejo y observa durante unos minutos las imágenes que aparecen.

Percibe las sensaciones que aparecen, sin pensarlo con la mente. Percibe como el sonido y las imágenes van fluyendo por tu cuerpo, siente las partes del cuerpo a donde llegan.

Cuando termines de visualizar esto, vas a comenzar a percibir la energía que va más allá de tu cuerpo físico, tu campo de energía. Percibe como está ese campo, si necesita de algún color o luz, o si necesitas expandirlo, ampliarlo o contraerlo. Déjate llenar de tus percpeciones, siente más allá de lo que dice tu mente.

¿Cómo está tu energía?

Luego de este ejercicio con tu campo de energía toma un objeto, cualquier objeto que tengas cercano.

Obsérvalo al tiempo que mantienes el sonido y las imagenes en el video y simplemente percibe qué vibración te transmite ese objeto. ¿Es una energía suave o pesada?, ¿hay alguna información que ese objeto te transmita?, ¿qué sensaciones te da?

Otro ejercicio que puedes hacer es conectarte con una situación en tu vida, y observando las imágenes y escuchando el sonido, percibir la energía de esa situación, la información que surge más allá de la mente.

El video dura 2 horas, así que puedes jugar, experimentar y entrar en conexión con la vibración de tu tercer ojo el tiempo que sientas necesario.

Comenzar a abrir la conexión con nuestro tercer ojo, es abrirnos a posibilidades más amplias de conciencia. Permitirnos ver la vida, las situaciones y a nosotros mismos con una mirada más amplia e integral, Reconocernos no solo como seres físicos, sino también somo seres energéticos. Todo es energía, todo es vibración. Toda la vibración tiene una información.

SOMOS UNO – Estamos juntos en esto